Colonia Tetramorium semilaeve: una colonia con varias sorpresas
Recientemente me donaron una colonia de Tetramorium semilaeve y quien lo hizo me avisó de que me iba a llevar alguna sorpresa. No sabía a qué se refería hasta que la colonia se mudó a su nuevo hormiguero y las pude observar con detenimiento. Lo que vi me dejó totalmente fascinado…había leído mucho sobre ellos pero nunca los había visto «en vivo».
Pero como diría una major cruentatus…¡vayamos por partes!
Preparando el hogar
Nunca había tenido Tetramorium semilaeve, pero se podría decir que a simple vista son son como unas Pheidole con talla única de sombreros. A diferencia de estas, las obreras semilaeve son todas iguales y no nos encontramos ninguna cabezona intimidante. En cuanto a requerimientos de humedad, no son tan yonkis de ésta como las Pheidole, aunque sí requieren de cierta humedad ambiental.
Como la colonia ya iba bastante avanzada decidí probar uno de los hormigueros modulares Ant-magnet con el original sistema con base de yeso y sílice y una caja de forrajeo Magnet Box de 10×10 cm. Podéis leer más sobre este sistema modular aquí.
Aquí podéis ver el set completo, que es muy, muy recomendable para cualquier especie:
Lo primero decir que a pesar de su pequeño tamaño no ha habido ni una sola fuga, así que un fuerte aplauso para las conexiones magnéticas de este hormiguero modular.
Lo segundo, que se trata de un hormiguero que supone un entorno tremendamente natural para las hormigas, y esto hace que en seguida se muden y se adapten a su nuevo hogar. No hay más que verlas en las fotos, que parecen tomadas en la naturaleza…si no fuera por el color verde de la arena :D.
Como curiosidades de la especie, podemos decir que Tetramorium semilaeve es una especie que puede ser poligínica, aunque para que varias reinas se acepten mutuamente deben ser del mismo vuelo…o tal vez del mismo nido, exactamente. Es decir, tienen que ser hermanas. De lo contrario probablemente se maten entre sí, así que cuidado con juntarlas a la ligera.
Otra cosa curiosa y que me ha dado unos buenos sustos en el poco tiempo que llevo con ellas, es que la reina cuando se estresa se hace la muerta. No sé si como mecanismo de defensa, pero es habitual que se encojan en posición fetal y no se muevan durante un buen rato, al menos hasta que sienten que el peligro ha pasado. Ya la he visto así un par de veces y pensaba que había muerto, pero para mi sorpresa tras un tiempo largo empiezan a moverse como si tal cosa. Tal vez sea que mi reina ha salido un poco troll y le gusta darme sustos…
Primera sorpresa
Una vez asentadas en sus nuevos aposentos, pude observarlas con mayor detalle, incluida a la reina, que es bastante pequeña y puede confundirse facilmente con una reina Solenopsis. Veamos…una cabeza, dos antenas, seis patas…y…¡vaya! ¡un pasajero! ¿¿Pero qué es esto??
Resulta que tenemos un acompañante en la colonia. Se trata de un ácaro comensal. Este tipo de ácaros por lo general no son perjudiciales para las hormigas y se alimentan de desperdicios que generan las propias hormigas. A veces son utilizados por algunos criadores de hormigas muy PROS para ayudar a mantener la limpieza de los hormigueros. Estos comensales suelen ser muy vagos y utilizan a las propias hormigas como medios de transporte para desplazarse por el hormiguero. Aquí podéis ver que en esta ocasión ha elegido la montura real para su paseo diario (lo podéis ver justo en la chepa de la reina).
Segunda sorpresa
Pero eso no es todo. Mientras observaba la colonia algo me llamó la atención. Parecía que había media hormiga moviéndose rápidamente. En un principio parecía alguna hormiga que había perdido el gáster, pero se movía demasiado deprisa. Decidí verlo a través de la macro y…¡sorpresa! ¡Un simpático grillo mirmecófilo! Se llama mirmecófilo a aquellas criaturas que viven en asociación con las hormigas. En el vídeo podéis ver lo diminuto que es (¡casi la mitad que una obrera de tetramorium!)
Se trata de un Myrmecophilus acervorum, que es un grillo diminuto que convive con las hormigas haciéndose pasar por una de ellas con el contacto de sus antenas con la de las hormigas. Estos grillos viven dentro de los hormigueros y son cuidadados, protegidos y alimentados por las hormigas. ¡Qué curioso!
¿Qué tal se desarrollará esta familia tan peculiar?